Cirugía Mínimamente Invasiva

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Cirugía Mínimamente Invasiva

En una cirugía mínimamente invasiva, los médicos aplican una gran variedad de técnicas para realizar operaciones que produzcan menos daños en el cuerpo que una cirugía abierta. En general, la cirugía mínimamente invasiva está relacionada con menos dolor, una estadía más corta en el hospital y menos complicaciones.

Las innovaciones continuas en la cirugía mínimamente invasiva proporcionan beneficios para los pacientes que sufren una gran variedad de enfermedades. Si necesitas cirugía y piensas que puedes ser un candidato para este enfoque, consulta con tu médico.

En Uros Asssociats nos especializamos en:

Cirugía Robótica en Urología para:
-Prostatectomía.
-Cistectomía.
-Nefrectomía Radical.
-Nefroureterectomía.
-Pielopastia.
-Reimplante uretral.
-Linfadenectomía Retroperitoneal.

Laparoscopia Urológica para:
-Prostatectomía.
-Cistectomía.
-Nefrectomía Radical.
-Nefroureterectomía.
-Pielopastia.
-Reimplante uretral.
-Linfadenectomía Retroperitoneal.

Endourología para:
-Enucleación prostática con Láser Holmiun.
-Fotovaporización Prostática.
-Litotricia extracorpórea por ondas de choque (LEOC).
-Ureterorrenoscopia (URS).
-Tratamiento con láser de Litiasis ureteral y renal.
-Cirugía retrógrada intrarrenal (RIRS).
-Nefrolitotomía Percutánea (NLP).

Cirugía robótica en Urología

La cirugía robótica es aquella cirugía que se realiza utilizando el robot Da Vinci, una máquina especial que ofrece muchas ventajas. Es una técnica mínimamente invasiva muy avanzada que permite al cirujano llevar a cabo procedimientos quirúrgicos de una forma muy precisa. Este tipo de cirugía suele realizarse bajo anestesia general.

Las ventajas de la cirugía robótica respecto a la cirugía tradicional abierta es que, al poder realizar incisiones menores y precisas, el tiempo de recuperación, así como el dolor asociado a la intervención quirúrgica, es menor. Con respecto a la laparoscopia, el robot ofrece una mayor maniobrabilidad instrumental, libertad de movimientos, precisión y ergonomía. En la cirugía prostática, en específico, el robot permite la posibilidad de conservar el tejido sano, preservando los nervios que no están afectados por el tumor, recuperándose así la continencia urinaria y la función eréctil más rápido que con otras técnicas quirúrgicas

Cada vez son más los tratamientos quirúrgicos que pasan a realizarse mediante cirugía robótica debido a las ventajas que ésta supone tanto para el paciente como para el cirujano. En Urología, el robot se utiliza en el cáncer de próstata, cáncer de riñón, cáncer de vejiga, prolapso genital, cirugía reconstructiva de la vía urinaria, entre otras. 

El robot Da Vinci. Cuenta con una consola central que despliega brazos mecánicos controlados remotamente por una segunda consola informática manipulada por el especialista. El robot reproduce los movimientos del cirujano y reduce el temblor del pulso humano, y además permite que los instrumentos quirúrgicos giren 360º, movimientos que son imposibles para un ser humano. Mientras el especialista cirujano realiza la intervención, observa todo el procedimiento en un monitor estereoscópico con visión 3D real que le permite apreciar la profundidad, pudiendo ampliar la imagen y por tanto ver mejor la sección que opera, operando si es necesario a escasos milímetros de distancia de la zona a operar.

En un futuro cercano, será posible operar cirugía robótica a través de una incisión única, incisión por la que se introducirán todos los brazos robóticos disminuyendo el traumatismo sobre la pared abdominal, ofreciendo también ventajas estéticas para el paciente.

Ventajas

  • Rápida recuperación. Algunos procedimientos permiten el alta hospitalaria en tan sólo 48 hrs. 
  • Menos dolor postoperatorio.
  • Incisiones mínimas. Cicatrices a veces imperceptibles.
  • Precisión quirúrgica, ergonomía, amplia maniobrabilidad de los instrumentos, amplitud de imagen 3D, evita el temblor humano
  • Permite la preservación del tejido sano y la exéresis precisa del tejido enfermo.

En Uros Associats contamos con especialistas certificados en cirugía robótica, ampliamente formados y con vasta experiencia en cirugía prostática, renal, vesical y retroperitoneal, entre otras, siendo a su vez tutores de otros especialistas que inician su curva de aprendizaje para realizar técnicas de alta complejidad como son estas técnicas de cirugía robótica. 

Laparoscopia en Urología

La laparoscopia es una técnica quirúrgica que permite inspeccionar e intervenir la cavidad abdominal sin realizar incisiones grandes. Se trata de una innovación en los últimos 30 años como parte de la cirugía mínimamente invasiva, ya que consigue excelentes resultados con un postoperatorio mucho más corto y agradable que el de la cirugía abierta. La herramienta utilizada, el laparoscopio, es un tubo fino que contiene un sistema óptico acoplado a una fuente de luz en un extremo, con lo cual el especialista puede observar las estructuras e identificar posibles patologías. Asimismo, es posible introducir otros instrumentos, generalmente pinzas, bisturí o tijeras, a través de puertos de trabajo que se llaman trócares. Las incisiones de la cirugía laparoscópica suelen medir de 0.5 a 1.5 cm, mientras que estas mismas operaciones en la cirugía convencional podrían suponer incisiones de entre 10 y 20 cm. El gas CO2 se insufla dentro del abdomen para favorecer la visión y desarrollar un espacio de trabajo adecuado para trabajar. La introducción de las torres 3D que permiten al cirujano realizar cirugías con visión tridimensional, es una de las últimas aportaciones, que han permitido mejorar los resultados de esta técnica o vía de abordaje quirúrgico.

En Urología, la laparoscopia se utiliza sobre todo en las patologías de la próstata, de la vejiga, del uréter y del riñón

Ventajas

Las ventajas de la laparoscopia en urología son muchas:

  • Menores incisiones; cicatrices más pequeñas, a veces imperceptibles.
  • El tránsito gastrointestinal se restablece más rápido que con la cirugía abierta convencional, lo que se traduce en un menor tiempo de hospitalización y recuperación. 
  • Hay menos posibilidades de complicaciones infecciosas.
  • Menor sangrado intraoperatorio
  • Disminuye el dolor postoperatorio.
  • Menor estancia hospitalaria
  • Reinicio precoz de actividad laboral

Accesos laparoscópicos

La laparoscopia puede realizarse por vía anterior (o transperitoneal), o por vía posterior (o retroperitoneal). La decisión final acerca de la elección de una vía de acceso u otra dependerá generalmente de la experiencia y comodidad con el procedimiento a realizar por parte del cirujano que vaya a realizar la intervención.

Acceso transperitoneal (anterior). La mayoría de los procedimientos quirúrgicos laparoscópicos en Urología se realizan de forma transperitoneal, es decir, en el espacio donde están los intestinos. La facilidad de acceso a gran número de órganos y estructuras que ofrece esta vía ha hecho que este abordaje se popularice tanto en la Urología como en el resto de especialidades. Sin embargo, la localización retroperitoneal de los riñones, las glándulas adrenales, la vejiga, la próstata y las cadenas linfáticas retroperitoneales que recogen la linfa de órganos como los testículos y el cérvix plantean la problemática de la disección y desplazamiento de otros órganos y estructuras para su extirpación.

Acceso retroperitoneal (posterior) o Retroperitoneoscopia. El abordaje retroperitoneal, en cambio, ofrece ventajas potenciales sobre todo en pacientes con sospecha de adherencias intraperitoneales por cirugías anteriores, traumatismos, infección y radioterapia, entre otras. Consigue un acceso más rápido al espacio retroperitoneal (espacio donde se encuentran los órganos urológicos, como riñones, uréteres, glándulas adrenales, cadenas linfáticas de los grandes vasos), ya que evita la disección y movilización intestinal. Evita la posibilidad de lesión vascular o intestinal por las pinzas laparoscópicas. Disminuye el riesgo de lesión catastrófica de grandes vasos, ya que los trócares se colocan bajo visión directa. Disminuye también el riesgo de que aparezcan hernias incisionales. Aparte, en tumores renales situados en la cara posterior del riñón, dado que el acceso es posterior, se localiza de manera más rápida y menos agresiva, por lo que es la técnica de elección.

En Uros Associats contamos con especialistas ampliamente entrenados en ambas vías de acceso laparoscópico, pioneros en la introducción de estas técnicas en nuestro país. En su bagaje de miles de procedimientos se despliega su vasta experiencia y excelentes resultados. 

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